
La anticipación por Avengers: Doomsday ha alcanzado niveles estratosféricos con la confirmación de la llegada de varios miembros de los X-Men al Universo Cinematográfico de Marvel (UCM). Sin embargo, más allá del emocionante cruce de universos y la promesa de una trama explosiva que reunirá a personajes tan diversos como los Thunderbolts y los Cuatro Fantásticos, existe una oportunidad dorada para que Marvel Studios corrija una espina clavada en el corazón de los fanáticos mutantes desde el inicio de la franquicia de los X-Men de Fox en el año 2000: la notoria ausencia de trajes fieles a los cómics.
En una época donde el cine de superhéroes aún buscaba su identidad tras tropiezos notables y justo antes de la explosión del género impulsada por el Spider-Man de Sam Raimi, la visión de Bryan Singer para los mutantes de Fox priorizó un enfoque más "realista" y cercano a la estética de películas como The Matrix. Esta decisión, si bien resultó en una película inaugural aclamada por su calidad narrativa y atractivo para un público amplio, relegó al olvido los icónicos y coloridos uniformes que definieron visualmente a personajes como Cíclope, Jean Grey, Tormenta y el resto de la Patrulla-X en las páginas de Marvel Comics.

La justificación ofrecida en su momento, y hasta parodiada dentro de la propia película con la ya célebre pregunta de Cíclope a Wolverine sobre su preferencia por el "spandex amarillo", buscaba unificar visualmente al equipo con trajes de cuero oscuros y funcionales. Si bien esta elección estética se alineaba con las tendencias cinematográficas de la época, dejó un vacío significativo para los seguidores del material original, quienes anhelaban ver a sus héroes enfundados en los diseños vibrantes y distintivos que los hicieron inconfundibles.
Ahora, con la llegada de los X-Men al UCM a través de Avengers: Doomsday, Marvel Studios se encuentra en una posición privilegiada para enmendar este "pecado" estilístico. Las recientes incursiones en la fidelidad visual, como el Profesor X en su icónica silla amarilla flotante en Doctor Strange in the Multiverse of Madness y la Bruja Escarlata luciendo su traje clásico al final de WandaVision, señalan un cambio de paradigma en la forma en que el UCM aborda la representación de sus personajes.

La inclusión de un Wolverine con un traje sorprendentemente fiel a los cómics en la próxima Deadpool & Wolverine no hace más que alimentar la esperanza de que esta tendencia se extienda a los mutantes que harán su debut formal en el UCM en Avengers: Doomsday. Imaginar a Mystique con su elegante vestido blanco, a un Cíclope interpretado por un nuevo actor (o incluso el regreso de James Marsden) con su distintivo uniforme azul y cinturón amarillo, o a una Jean Grey irradiando poder con su traje verde y dorado, desataría una ola de entusiasmo entre los fans que han esperado pacientemente estas representaciones en la pantalla grande.
Si bien la lógica narrativa detrás de un cambio repentino de vestuario podría generar interrogantes, el multiverso ofrece un lienzo lo suficientemente amplio como para justificar estas transformaciones visuales sin necesidad de explicaciones exhaustivas. Tal como la aparición del traje clásico de Wolverine en su próxima película no requiere una justificación profunda, la adopción de uniformes icónicos por parte de los X-Men en Doomsday podría ser simplemente un regalo para los fans, una celebración visual de la rica historia de estos personajes en los cómics.