
Cuando se habla de wéstern es prácticamente inevitable que nombres como los de Clint Eastwood o John Wayne vengan a la mente. No es para menos, pues ambos son dos de las principales leyendas del género en todos los tiempos. Sin embargo, no fueron los únicos que dejaron su huella.
Junto a ellos también hubo una generación completa de actores que revolucionaron el cine para siempre con sus profundas interpretaciones en historias que, situadas en el Oeste Lejano, incluían acción, comedia, drama e intriga.
Uno de los ejemplos más claros es el de Lee Van Cleef, el cual hizo películas como A la hora señalada, Agente especial o Cazador de forajidos al inicio de su carrera.

A pesar que ya eran proyectos de gran renombre, nunca logró consolidarse en el papel principal o en filmes que pudieran realmente ponerlo en el foco de los reflectores de un Hollywood que pasaba por constantes transformaciones.
De hecho, uno de los aspectos que más le afectó es que en la industria cambió el concepto de estrella, colocando de lado el talento o el impacto de la caracterización para priorizar el aspecto físico.
Por ese motivo, los grandes estudios comenzaron a ignorarlo y en varios momentos decían que su nariz era el problema. Cuando fue a hacer High Noon, uno de los wéstern más famosos de todos los tiempos, se acercaron a decirle que "su nariz era demasiado amenazante", así que si se hacía una cirugía, el rol principal sería suyo. No en tanto, se negó.

Pero como el productor Stanley Kramer quería que el artista estuviera, le propusieron un personaje menos relevante llamado Jack Colby y lo tomó. Lloyd Bridges fue el que tomó su lugar en el largometraje finalmente.
El gran resurgir de Lee Van Cleef
De esta manera, los 50 no cerraron como una década promisoria para su trayectoria, así que muchos creyeron que su retiro anticipado sería un hecho. Aun así, siguió intentándolo hasta que consiguió construir un perfil, personificando a los malos o a los bandidos más audaces del cine de aquella época. Por otro lado, logró hacer una fuerte amistad con Clint Eastwood y el director Sergio Leone.
Los tres se volvieron un tridente sinónimo de éxito y lideraron gloriosas películas como Por unos dólares más o el gran clásico El bueno, el malo y el feo.