Max estrenó recientemente Del otro lado del jardín, una película colombiana que explora el concepto de la eutanasia desde la perspectiva del amor. En esta ocasión, el asunto es puesto desde la óptica de un personaje real que vivió cada momento que se muestra en pantalla.
Carlos Framb, un reconocido escritor antioqueño, asistió la muerte de su madre en 2007, por lo que estuvo preso por 18 meses mientras se le procesaba por homicidio. Sin embargo, poco a poco la justicia local descubrió que en realidad no era un asesino.
Julián Román fue el elegido para ponerse en los zapatos del poeta y reveló a Sensacine Colombia en exclusiva cómo cambió su visión de eutanasia considerablemente después de haber aceptado el papel y hecho el filme.
"De acuerdo, es eso: entender desde esa posición tan clara que tiene ahí Carlos, evidentemente, y las palabras que compartió el día del estreno. Creo que a todos nos conmovió nuevamente, porque la fortaleza de este libro, de esta decisión, de esta historia sobre su mamá buscando esa muerte, lo llevó a decirnos algo como: 'Volví a nacer y volví a querer la vida' a través de una decisión tan fuerte como es la muerte", comenzó diciendo el intérprete.
Asimismo, en diálogo con este medio agregó que "a mí me impactó, y creo que todavía lo estoy asimilando. Uno puede decir: 'Ah, mira, es que ya hoy en día lo tengo súper clarísimo', pero siento que esta película, al menos en mi caso, genera mucho más dudas y muchas más preguntas que día a día seguimos haciéndonos y que seguimos guardando en la mente, esperando algún día tener claridad sobre este tema".
¿De qué se trata 'Del otro lado del jardín'?
"Del otro lado del jardín es una cinta de drama, dirigida por Daniel Posada (serie de televisión Tijuana), que sigue la historia de Carlos, un poeta de cuarenta años, quien, cansado de presenciar el dolor de su madre, una adorable anciana de ochenta y dos años, aquejada con decenas de enfermedades y dolores, decide trazar un plan para ayudarle a morir y, después, acompañarla en ese viaje cometiendo suicidio. Sin embargo, sin esperarlo, Carlos despierta para encontrarse en la camilla de un hospital, acusado de un crimen por el que se enfrenta a 30 años de cárcel. El poeta no puede recordar nada desde el momento en que se recostó para morir hasta el instante en que recobró el conocimiento tres días después y cuando la historia se hace mediática, el reconocido poeta se transforma en un aborrecible presidiario, enfrentando las consecuencias de su decisión. En su tiempo de prisión y el juicio, Carlos se enfrenta a lo mas profundo del alma humana y reflexiona sobre la dicotomía de la vida y la muerte", menciona la sinopsis oficial.