Si hay un director icónico en esta generación es, sin sombra de dudas, Christopher Nolan. Con un poco más de la mitad de la edad de colegas suyos como Steven Spielberg, Clint Eastwood o Martin Scorsese, ha logrado impactar de manera similar a la audiencia mundial con sus producciones.
En sus obras, ha mostrado ser de los más versátiles de Hollywood. En su filmografía tiene títulos de superhéroes como la trilogía de El caballero de la noche, otros de guerra como Dunkerque, pasando por la ciencia ficción con algunos como Interestelar o Tenet e incluso los thrillers le han sabido quedar bien con ejemplos como el de Memento o Insomnio.
Vale la pena destacar que 2023 fue su gran año. Después de varios intentos, finalmente se llevó el premio Oscar a Mejor director con el drama biográfico Oppenheimer. Asimismo, este filme recibió la estatuilla más importante de la noche, la de ser el favorito de la Academia.
Warner Bros. Pictures
Y sí, la trayectoria de Christopher Nolan es más que reconocida, pero aun así todavía hay algunas curiosidades del cineasta que no han salido a la luz. Es más, tiene tradiciones o prácticas en el set que muy pocos saben.
¿Sabías que Christopher Nolan lleva esto cargado a todas partes?
Una de las características secretas de los rodajes del desarrollador, es que él siempre lleva algo colgado en el cuello. Muchos, a lo largo de los años, se han preguntado qué es. Sorpresivamente, no es un artículo de última tecnología, como podría pensarse dado a que el cineasta es un precursor de los avances técnicos en el cine.
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Contrario a ello, es un televisor portátil Casio EV-4500. La funcionalidad de este pequeño aparato es poder mostrarle al creativo lo que se está haciendo en el estudio frente a las cámaras en tiempo real.
Para eso, las cámaras IMAX que utiliza su equipo están modificadas con un adaptador que emite ondas UHF/VHF y el monitor tiene una antena que permite recibirlas. Básicamente, Nolan mira televisión en tiempo real con las imágenes que toma.
Sobre el artilugio, AdoroCinema detalla que fue "comercializado durante las décadas de 1990 y 2000, el televisor es una simple pantalla LCD de 4 pulgadas. Su resolución de 405x305 no es exactamente de última generación. La relación de aspecto de la pantalla es 4:3 y la duración de la batería es de aproximadamente 4 a 5 horas".