Todos conocen a Sofía Vergara por su papel de Gloria en Modern Family. Sin duda, esa fue la producción que catapultó la fama que ya venía cosechando desde años atrás la barranquillera en Hollywood. De hecho, gracias a la serie es que fue nominada a cuatro premios Emmy y ganó cuatro Screen Actors Guild Awards.
Sin embargo, para poder llegar hasta ese gran punto en su trayectoria, la intérprete tuvo que pasar por mucho. Inicialmente, vale destacar algunos de los proyectos en los que estuvo para convertirse en un ícono de la comedia estadounidense.
El gran lío, The 24th Day, Cuatro hermanos o Madea Goes to Jail fueron algunos de los filmes que demostraron de lo que estaba hecha la colombiana, haciendo con que 20th Century Fox confiara en ella y la colocara en el programa de televisión que duró más de una década por su éxito sostenido.
Paramount Pictures
Pero antes de estar en el cine de los Estados Unidos, Sofía Vergara ya había hecho otras cosas muy diferentes frente a las cámaras. Fue presentadora de televisión en programas como A que no te atreves o Fuera de serie y actuó en novelas como Muchachitas o Acapulco, cuerpo y alma.
Tales roles la habían ayudado a afincar su esencia latina en su trabajo, lo que la ha caracterizado desde sus inicios hasta el día de hoy.
Asimismo, antes de salir de salir de Colombia, fue modelo de comerciales. De hecho, fue su participación en una propaganda de Pepsi lo que hizo que estallara su imagen a nivel local e internacional.
No obstante, su camino profesional se vio empañado por algunos dramas. “Mi hermano mayor, Rafael, fue asesinado en Colombia. Fue una pesadilla […] un suceso muy dramático, le dispararon y desafortunadamente ninguno de nosotros se pudo despedir de él”, comentó en su momento.
Sofía Vergara también recordó que su pariente fue asesinado justamente por haber hecho parte del negocio del narcotráfico. “Desafortunadamente mi hermano formó parte de ese negocio”, agregó.
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Los demás dramas en la vida de Sofía Vergara
Por su parte, la protagonista de Griselda sufrió también en el amor. Cuando era muy joven y tenía tan solo 18 años, se casó con José Luis González-Ripoll, un empresario de su natal Barranquilla, quien es el padre de su hijo Manolo.
Pero al pasar de los meses, sus planes eran tan distintos que todo fue insostenible. A pesar de ese final, fuentes aseguran que mientras el amor estuvo, fue un romance adolescente digno de una película.
“Filiberto Manzini, un amigo en común de Sofía y José Luis, los presentó en el Country Club y la conquista comenzó de inmediato. Sofía, de catorce años, andaba aún con su uniforme del colegio Marymount, y Joe ya la cortejaba en su moto, una Yamaha 600 c.c. reformada por él mismo y que producía tanto ruido que anunciaba su llegaba a un lugar con varias cuadras de anticipación”, indica el portal Kienyke.