George R. R. Martin, creador del universo de 'Juego de Tronos', no ha ocultado su descontento con algunas decisiones creativas que se han tomado en la serie 'House of the Dragon'. A pesar de su rol como productor ejecutivo, el famoso escritor ha criticado abiertamente un cambio en la trama que considera perjudicial para la narrativa y el impacto emocional de la historia. El eje de su molestia recae sobre la omisión de un personaje clave, el príncipe Maelor, cuya ausencia —según Martin— ha provocado un “efecto mariposa” con implicaciones significativas para las temporadas futuras.
Durante el estreno de la segunda temporada, uno de los eventos más brutales y desgarradores del libro de Martin, conocido como la secuencia de “Sangre y Queso”, fue adaptado para la pantalla, pero no sin modificaciones que inquietaron al autor. En la serie, Aegon y Helaena Targaryen tienen dos hijos, mientras que en la versión literaria cuentan con tres. Este tercer hijo, el príncipe Maelor, fue eliminado en la adaptación televisiva, lo que generó el malestar de Martin.
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La secuencia en cuestión es una de las más importantes en la historia de la guerra civil conocida como la Danza de los Dragones. En la novela, la reina Helaena se ve forzada a tomar una decisión imposible: escoger cuál de sus tres hijos debe morir para salvar a los demás. La intensidad de esta escena, que Martin compara con el devastador dilema de la película 'La decisión de Sophie', se ve diluida al reducir la cantidad de hijos de la pareja en la serie. Según Martin, la elección de Helaena pierde gran parte de su carga emocional al no tener que elegir entre tres hijos, y en cambio ofrecer un soborno en forma de joyas a los asesinos, algo que el escritor consideró mucho menos impactante.
En su blog, Martin dejó clara su postura: aunque la escena en la serie es efectiva, “la versión del libro es más poderosa”. Para él, la crudeza de los asesinos y el coraje que muestra Helaena en el libro, ofreciendo su propia vida en lugar de un soborno, son elementos cruciales que se pierden en la adaptación. Aunque Martin inicialmente aceptó la decisión del showrunner Ryan Condal de omitir a Maelor por razones presupuestarias y logísticas, su preocupación creció al descubrir que el personaje nunca aparecería en la serie, lo que, según él, compromete el desarrollo de varios eventos clave en las futuras temporadas.
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Martin explica que esta omisión afecta directamente el arco narrativo de la reina Helaena, cuyo suicidio en la tercera temporada, según los planes actuales de Condal, carecerá del detonante emocional que existía en el libro: la muerte de su hijo menor. “La pérdida de Maelor debilita no solo el impacto emocional de Sangre y Queso, sino también otros momentos clave que dependen de esa tragedia”, afirmó Martin.
El escritor lamenta que estos cambios puedan generar un “efecto mariposa” que desvíe la historia original de manera irremediable. “Todo tiene un propósito, todo ayuda a enlazar las tramas”, dijo, enfatizando que la eliminación de ciertos eventos podría socavar la coherencia de la narrativa. Martin no solo está preocupado por lo que ya ha ocurrido, sino también por lo que está por venir, sugiriendo que en las temporadas 3 y 4 podrían surgir “mariposas más grandes y tóxicas”, en referencia a otros cambios que podrían alterar aún más la esencia de la historia.
HBO
Aunque HBO ha defendido las decisiones creativas de Condal, argumentando que adaptaciones como esta son inevitables cuando se lleva un libro a la pantalla, Martin sigue convencido de que estos cambios, aunque aparentemente menores, pueden desestabilizar la estructura de la trama. En este caso, la ausencia de Maelor no es solo una cuestión de simplificación; para Martin, representa una pérdida emocional y narrativa que podría afectar profundamente el legado de 'House of the Dragon'.
La polémica sigue latente, y aunque los últimos episodios de la segunda temporada fueron bien recibidos por la crítica, la tensión entre la visión del autor y la del equipo de producción podría continuar marcando el rumbo de la serie.