John Goodman es, sin duda, la imagen perfecta de Pedro Picapiedra para toda una generación que creció viendo la película de Los Picapiedra en 1994. Para muchos, especialmente aquellos que conocieron a los personajes a través de la versión de acción real y no de los dibujos animados originales de los 60, Goodman se convirtió en sinónimo del famoso personaje de la Edad de Piedra. Pero lo que pocos saben es que el actor nunca quiso formar parte de esta comedia ambientada en la prehistoria.
A mediados de los 90, John Goodman ya había trabajado tres veces con los aclamados hermanos Coen, en películas como Barton Fink, y había cruzado caminos con Steven Spielberg en varias ocasiones. En 1989, participó en la fantasía romántica de Spielberg, Always, y un año después, en la película de terror Arachnophobia, que Spielberg produjo.
Spielberg también estuvo involucrado en la producción de la película de Los Picapiedra, dirigida por Brian Levant. Desde mucho antes, Spielberg había estado buscando actores que pudieran dar vida a los personajes icónicos de la caricatura. Según reveló Goodman en el podcast de Marc Maron, WTF, Spielberg prácticamente lo obligó a unirse al elenco de Los Picapiedra.
"Me lo impusieron", explicó Goodman, recordando sus sentimientos encontrados al recibir la noticia. "Cuando asistí a la primera lectura del guion de Always, Spielberg entró, se sentó y dijo: 'Señoras y señores, tengo un anuncio que hacer. Acabo de encontrar a mi Fred Flintstone". Y yo pensé: '¡Dios mío, por favor, no!' Sabía que pasaría el resto de mi vida escuchando '¡Yabba Dabba Doo!'. Odiaba a Los Picapiedra desde quinto grado. Me dejó completamente descolocado. No era algo que yo quisiera hacer en absoluto".
Spielberg no dejó en paz a John Goodman
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A pesar de sus reservas, Spielberg no se rindió fácilmente. "Seis meses antes de que comenzara el rodaje, me emborraché, lo llamé y le dije: 'No creo que pueda hacerlo'", recordó Goodman. "Pero al final, lo hice de todos modos".
Aunque Goodman tenía dudas, la decisión de aceptar el papel resultó ser un éxito en taquilla. Los Picapiedra recaudó alrededor de 358 millones de dólares, convirtiéndose en la cuarta película más taquillera de 1994, superando a clásicos de culto como La máscara, Speed y Pulp Fiction.
Sin embargo, para la secuela, Goodman decidió no regresar, al igual que sus coprotagonistas Elizabeth Perkins y Rick Moranis. Una decisión que, en retrospectiva, fue acertada. Los Picapiedra en Viva Rock Vegas no logró replicar ni la calidad ni el éxito comercial de su predecesora.
La historia detrás de la participación de Goodman en Los Picapiedra es un claro ejemplo de cómo incluso las grandes estrellas pueden ser empujadas a papeles que nunca imaginaron. Y aunque él no estaba entusiasmado con la idea, su interpretación de Fred Flintstone ha quedado grabada en la memoria de muchos.