Desde el primer episodio de 'House of the Dragon', los fanáticos más atentos del universo creado por George R. R. Martin han podido notar un objeto que sirve como un vínculo esencial entre la precuela y la exitosa serie de 'Game of Thrones'. En la escena donde el rey Viserys I Targaryen (interpretado por Paddy Considine) habla con su hija Rhaenyra (Milly Alcock) sobre el peligro del renacimiento del Rey de la Noche y el destino de los Siete Reinos, la cámara hace un primer plano a la daga que Viserys lleva consigo. Esta misma daga fue utilizada para intentar asesinar a Bran Stark en la primera temporada de 'Game of Thrones', desatando la Guerra de los Cinco Reyes. Posteriormente, la daga se convirtió en el arma de Arya Stark, quien la usó para ejecutar a Petyr Baelish y, más crucialmente, para acabar con el Rey de la Noche, poniendo fin a la Larga Noche.
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La daga, ornamentada con vidriagón, fue forjada en los tiempos de Aegon el Conquistador, el antepasado de Viserys, y simboliza una continuidad no solo física sino también narrativa. Su aparición en 'House of the Dragon' sugiere que el arma tendrá un papel significativo en los eventos que están por desarrollarse, especialmente considerando que en los avances de la serie se ha visto a Alicent Hightower sosteniéndola, indicando su importancia en la intriga política y familiar que caracteriza a los Targaryen.
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La inclusión de la daga, un símbolo de legado, poder y destino en el universo creado por George R.R. Martin, sirve como un guiño a los fanáticos de 'Game of Thrones', conectando los momentos clave de ambas series y ofreciendo un ancla narrativa que atraviesa generaciones de personajes y conflictos. Este detalle no solo enriquece la trama de 'House of the Dragon' al vincularla con la épica lucha contra los Caminantes Blancos, sino que también añade una capa de anticipación y especulación sobre cómo esta arma continuará influyendo en la historia de Westeros.