
Ya se estrenó la película animada del año, sin sombra de dudas. Intensamente 2 acaba de romper varios récords en todo el mundo, incluyendo Colombia, que ha sido uno de los territorios en los que ha tenido una mejor recepción por parte de la audiencia durante su primera semana al aire.
Se convirtió en la mejor apertura de una cinta de animación en la historia del país. Con 283.282 espectadores en su jueves de lanzamiento, superó en un 11% al público que tuvo Super Mario Bros. y en un 4.47% a Toy Story 4, que eran las que lideraban el podio hasta el momento.
En parte, su gran éxito se debe a que la trama se volvió mucho más profunda, comparándose con la primera entrega. Para esta ocasión, hubo personajes que reflejaban las escandalosas emociones de la adolescencia tales como la ansiedad, el aburrimiento, la vergüenza, la nostalgia o la envidia.

Incluso, la primera fue la que se robó el show por completo. Al colocar al frente al principal desafío de muchos jóvenes, el filme logró conectar con quienes la vieron, incluso haciéndolos derramar algunas lágrimas por sentirse respaldados, acompañados o seguros.
En inglés, hubo un encanto adicional alrededor del personaje y es que Maya Hawke, fue la encargada de darle su voz. "Puedes pasar por algo difícil y, de repente, tu ángel de la guarda, tu voz interior, ya no es de fiar y te lleva por el mal camino y te da consejos raros", dijo a Vanity Fair sobre su personaje.
Por esa descripción que dio la intérprete, fue que ansiedad se mostró como una antagonista en el proyecto de Pixar. Su desespero por hacer que Riley fuera exitosa, la llevó a extralimitarla, proporcionándole así sus primeras crisis.

A pesar de eso, Pixar dice que ansiedad no fue la villana de 'Intensamente 2'
Jason Deamer, diseñador de producción, explicó que “cuando se leen comentarios del trabajo puede haber cien buenos, pero uno se clava en el malo. Todos tendemos a hacer esto. No quiero decir que la ansiedad sea algo malo necesariamente, la necesitamos para prevenirnos de las cosas, así que no queríamos hacerla un personaje malo. Juega el rol de antagonista, pero lo hacemos de una manera en la que no queremos acabar diciendo: ‘Largo de aquí, maldita ansiedad’. Tiene algo importante que hacer en la historia”.