A Christian Bale lo hemos visto en Batman, American Psycho, El Maquinista, y en 2011 lo vimos ganar el Oscar a Mejor actor de reparto por The Fighter, todo esto lo ha consagrado como uno de los actores capaz de las más locas transformaciones físicas. Sin embargo, hubo un momento de su carrera en el que pensó dejarlo todo ¿La razón? La intensa presión a la que se vio sometido durante el rodaje de una película de Steven Spielberg.
Cuando sólo tenía 13 años, Christian Bale rodaba bajo la dirección de Steven Spielberg en El imperio del sol. En esta película interpreta a James, el joven hijo de un industrial británico que vive en la Concesión Internacional de Shanghai en 1941, y que se encuentra encarcelado en un campo de prisioneros.
Con este papel bajo la dirección de un gigante, Christian Bale fue aclamado por la crítica y colocado muy pronto bajo los reflectores del mundo. Su temprana fama no fue de su agrado, hasta el punto de querer retirarse de la industria habiendo apenas entrado.
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Cuando un periodista de The Talks le pregunta al actor qué influencia tuvo Steven Spielberg en su deseo de convertirse en actor, la respuesta que dio fue sorprendente. "Hizo todo lo contrario. Me hizo decirme a mí mismo 'no quiero volver a hacer eso nunca más'", dijo.
No le culpo personalmente, me lo pasé muy bien con él. Pero pasar por esta experiencia a una edad tan temprana, no se lo recomendaría a nadie.
"Cuando tienes 13 años, eres un adolescente. Deberías ser totalmente anónimo", continuó el actor. "Creo que realmente no es bueno que los niños se dediquen a una profesión tan adulta a una edad tan temprana. Por mucho que te diviertas, acabarás teniendo responsabilidades que no deberías tener a esa edad. Así que esa experiencia me hizo pensar que no quería ser actor. De hecho, no hice ninguna película durante unos años."
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La respuesta de Bale sorprendió a todos pues cualquiera pensaría que trabajar con Steven Spielberg es una oportunidad de la que nadie se quejaría. Luego, se refirió a qué lo impulsa a volver a un set de grabación y respondió: "Hacer algo creativo. Cuando las cosas van bien y estás disfrutando del proceso, es un momento de euforia y sólo quieres seguir haciéndolo".
Por fortuna, el actor cambió de opinión y siguió dándonos papeles memorables en películas que seguimos viendo hasta hoy. ¿Conocías esta historia de Bale y Spielberg? Bueno, ahora cuando vuelvas a ver El imperio del sol, seguro la verás diferente.