El cine ha tenido grandes títulos en los últimos años, los cuales se han metido en los anales de la historia y ya se pueden considerar como nuevos clásicos. Sin embargo, algunos no son derivados de ideas originales sino que se trata de remakes o adaptaciones de obras literarias.
Dentro de ese rubro, fue producida una nueva versión de Mad Max en 2015, 36 años después del lanzamiento de su primera entrega, que también logró impactar en su momento. No en tanto, esta nueva cinta se ganó muchas ovaciones y revivió el amor de la audiencia por la franquicia del guerrero de la carretera.
En esta reciente creación, el encargado de encarnar a Max fue Tom Hardy, sustituyendo así a Mel Gibson. Su papel hizo que su nombre fuera considerado para proyecto de gran relevancia en Hollywood más adelante.
Warner Bros. Pictures
De hecho, el largometraje en cuestión fue tan bien recibido por los expertos que obtuvo seis premios Oscar y recaudó 380.4 millones de dólares, cantidad equivalente prácticamente al triple de la inversión hecha por Warner Bros. Pictures, que fue de 150 millones de dólares.
No obstante, no todo fue color de rosas en la realización de este título, puesto a que Hardy no logró llevarse nunca bien con Charlize Theron, que interpretó a Furiosa, la coprotagonista.
¿Qué pasaba entre Tom Hardy y Charlize Theron en 'Mad Max'?
El británico hizo el filme cuando se conoció que estaba pasando por un conjunto de problemas personales/emocionales muy complejos, por los que le costaba a veces salir del camerino e incluso más de una vez llegó tarde a las grabaciones.
Por su parte, la sudafricana es reconocida en la industria del espectáculo por su disciplina con exactitud. Como practicó ballet a nivel profesional y fue artista desde muy joven, obtuvo costumbres de exigirse lo más que se pueda.
Warner Bros. Pictures
La diferencia entre sus actitudes los hizo chocar en repetidas ocasiones. "La presión era a veces abrumadora. Lo que Theron habría necesitado era un compañero mejor y con más experiencia que yo", dijo Hardy en su momento.
De hecho, George Miller, director de Mad Max, dio detalles de lo que pasaba.
"Son dos actores muy distintos", comienza diciendo el cineasta en una entrevista con The Telegraph. "Tom tenía algo roto dentro, pero también es brillante, y no sé qué le pasaba por ese entonces, pero teníamos que obligarle a salir de su caravana", explicó el desarrollador. "Charlize, por el contrario, era increíblemente disciplinada: su formación como bailarina se dejaba ver en la precisión de su trabajo, y siempre era la primera en llegar al plató", puntualizó también.