
Nacido en una familia de inmigrantes chinos y criado en los barrios de Minneapolis, James Hong comenzó su travesía en el mundo del espectáculo desde los 8 años, observando los ensayos de la Ópera china de San Francisco en la trastienda de su familia. A pesar de las expectativas culturales de sus padres, quienes veían la actuación como vergonzosa, Hong persistió en su sueño de ser actor, incluso graduándose como ingeniero civil antes de seguir su pasión.

En una época de segregación racial que lo encasilló en roles de villano asiático, James Hong logró trabajar con leyendas como Clark Gable, John Wayne y William Holden. Además, ha incursionado en el doblaje, prestando su voz a personajes como Chi-Fu en 'Mulan' y Mr. Ping en 'Kung Fu Panda'.
Con más de seis décadas de carrera, Hong se ha convertido en una leyenda viviente, dejando una huella imborrable en la historia del cine y la televisión. Habiendo superado los 90 años de edad, ostenta un impresionante récord de 672 créditos en su carrera hasta julio de 2020. Su versatilidad se refleja desde hablar mandarín con Keanu Reeves en 'El día que la Tierra se detuvo' hasta interpretar entrañables personajes animados. Su influencia va más allá de la actuación, ya que co-fundó el grupo de teatro East West Players para proporcionar un espacio a los talentos asiáticos en Hollywood.

Aunque Hong posee el récord de ser el actor con más películas en Hollywood, el título de la persona viva con más créditos en el cine pertenece a Brahmanandam Kanneganti en Bollywood. Sin embargo, a sus 94 años, Hong sigue activo y tiene su estrella en el Paseo de la Fama de Hollywood, siendo un faro de inspiración para las nuevas generaciones de actores asiático-americanos. Su legado perdura en cada fotograma, escribiendo capítulos inolvidables en la historia de Hollywood.