Fernanda Torres, nominada al premio Oscar 2025 por 'Aún estoy aquí', hizo parte del reparto de una cinta que también fue celebrada en la ceremonia pero en 1998
Sin duda, los Oscar 2025 serán una edición histórica para la premiación. Entre los grandes destaques de esta ocasión se encuentra la gran relevancia que toma Latinoamérica en la esfera internacional del cine, colocando a Aún estoy aquí, de Brasil, con tres nominaciones, incluidas la categoría de Mejor película, Mejor película en lengua no inglesa y Mejor actriz para Fernanda Torres.
Esta última se consagró con este filme en su país como una de las intérpretes más importantes de todos los tiempos, igualando lo conseguido por su madre, Fernanda Montenegro, en 2000 con Estación central.
Sin embargo, las premiaciones hollywoodenses no son un tema nuevo para Nandinha, como le dicen sus colegas y seguidores, sino que es un mundo al que ya ha estado acostumbrada desde hace más de dos décadas.

De hecho, en 1998 protagonizó una película que apareció en los Premios Oscar para competir por el rubro de cinta extranjera. Se trata, nada más y nada menos, que de Cuatro días de septiembre, un thriller político que cautivó a la región entera en aquella época.
El logro de la producción es que logró llevarse la estatuilla para suelo brasileño y puso a la artista en el radar internacional con 32 años.
Asimismo, cuando tenía 21 años solamente, figuró en el Festival de Cannes como Mejor actriz por su papel en Eu Sei que Vou Te Amar. Esa Palma de Oro fue la antesala para la gloria que la carioca recogería en lo postrero y actual con su trayectoria.
¿De qué se trata 'Cuatro días de septiembre'?
"Fernando y Cezar son dos jóvenes idealistas que han decidido unirse al Movimiento Revolucionario Ocho de Octubre. Pero su amigo Artur lo considera una idea descabellada y peligrosa, negándose a dejarse convencer por sus amigos. Pronto, los muchachos descubrirán que para pertenecer a este grupo han de cambiar de identidad y renunciar a vivir en sus casas con sus familias", comienza diciendo la descripción.
Asimismo, agrega que "los ingenuos jóvenes serán usados por la organización para secuestrar al embajador norteamericano en Brasil".
La cinta, también con contenido político en su trama como Aún estoy aquí, fue dirigida por Bruno Barreto, quien también se encargó de clásicos de la cultura latinoamericana como Doña Flor y sus dos maridos, Flores raras o Última parada 174.