Un encantador pueblo medieval en medio de la Selva Negra fue el escenario elegido por Tim Burton para una de sus películas más icónicas.
Si alguna vez te has dejado fascinar por la estética oscura y fantasiosa de las películas de Tim Burton, es posible que te sorprenda saber que una de sus producciones más memorables, 'Charlie y la fábrica de chocolate', fue rodada en un pequeño y encantador pueblo de Alemania. Gengenbach, ubicado en el corazón de la Selva Negra, fue uno de los principales escenarios que Burton eligió para crear la atmósfera de la historia de Willy Wonka. Con Johnny Depp en el papel principal, esta película trasladó al público a un mundo de colores vibrantes, dulces imposibles y paisajes que parecen sacados de un cuento.
Gengenbach es más que una simple locación cinematográfica. Con su arquitectura medieval perfectamente conservada y sus calles bordeadas por casas de entramado de madera, este lugar no parece solo un escenario de película, sino un verdadero viaje en el tiempo. Rodeado de viñedos y dominado por la presencia de torres medievales como Obertor y Niggelturm, el pueblo ofrece una sensación de misterio que encajó perfectamente con la visión artística de Burton. Es fácil entender por qué este rincón de la Selva Negra atrajo la atención de un director tan peculiar y cómo sus paisajes contribuyeron a la creación de una de las fábricas de chocolate más mágicas de la historia del cine.
La Plaza del Mercado, con su famoso Ayuntamiento convertido en el calendario de Adviento más grande del mundo, y las calles Engelgasse y Höllengasse, son solo algunos de los lugares que te sumergirán en un ambiente de ensueño. Para quienes buscan una experiencia más profunda, la iglesia barroca de Stadtkirche Sankt Marien y la torre Kinzig, que alguna vez formó parte de la muralla defensiva, ofrecen vistas impresionantes y un vistazo al pasado de este pueblo que sigue encantando a visitantes de todo el mundo.
Gengenbach no solo es un tesoro histórico, sino también un refugio para aquellos que buscan un poco de la magia del cine en la vida real. El cuidado y detalle con los que el pueblo ha sido preservado lo convierten en un destino imperdible para los amantes del cine y los viajeros que disfrutan de la historia. En este rincón escondido de la Selva Negra, Johnny Depp y Tim Burton dejaron su huella, fusionando la fantasía de la pantalla grande con la realidad de uno de los lugares más misteriosos y encantadores de Alemania.
¿Qué es la Selva Negra?
La Selva Negra (Schwarzwald en alemán) es una extensa y montañosa región boscosa ubicada en el suroeste de Alemania, en el estado de Baden-Wurtemberg. Este lugar es famoso por sus densos bosques de coníferas, que le dan su característico nombre, así como por su belleza natural, rica historia y leyendas. La Selva Negra se extiende desde la frontera con Francia y Suiza, y es una de las zonas más turísticas del país, atrayendo tanto a amantes de la naturaleza como a quienes buscan experiencias culturales.
El área es conocida por sus idílicos paisajes, que incluyen lagos, ríos, valles y picos montañosos, siendo el Feldberg la montaña más alta con 1.493 metros. Además, la región es famosa por sus pintorescos pueblos medievales, como Triberg, Baden-Baden y Gengenbach, que son símbolos de la arquitectura tradicional alemana con casas de entramado de madera.
Además de su belleza natural, la Selva Negra es también hogar de tradiciones culturales y artesanales, como los famosos relojes de cuco y los postres típicos como la tarta Selva Negra (Schwarzwälder Kirschtorte). También es un lugar lleno de mitos y leyendas, ya que los oscuros y frondosos bosques inspiraron numerosos cuentos de hadas recopilados por los hermanos Grimm.
¿Qué otras películas se han filmado aquí?
Además de 'Charlie y la fábrica de chocolate', otras cintas han tenido como locación este punto de Alemania. Según registros, producciones como 'El Experimento' (2001), 'El Cazador y la Reina del Hielo' (2016), 'La promesa' (2016) y 'El Mago de Oz' (1990), la popular serie de televisión alemana que adaptó la famosa historia de L. Frank Baum.
La Selva Negra ha sido utilizada también en documentales, comerciales y otras producciones que buscan capturar su esencia mítica y su belleza natural. Con sus tupidos bosques, pueblos medievales y colinas montañosas, este lugar sigue siendo una opción tentadora para el cine y la televisión.