Fue su entrega más ambiciosa y aún así fue un total fracaso en taquilla.
En Hollywood, cuando una película fracasa, el estudio generalmente la entierra para siempre, especialmente si se trata de una franquicia que prometía múltiples secuelas. Sin embargo, de vez en cuando ocurren excepciones. Ese es el caso de una película de ciencia ficción que, a pesar de su fracaso en taquilla hace 20 años, ha logrado mantenerse viva gracias a su protagonista. Y lo más sorprendente es que pronto veremos su cuarta entrega.
La historia de 'Las crónicas de Riddick'
La saga comenzó con Eclipse Mortal, una película de bajo presupuesto que costó 23 millones de dólares y sorprendió al convertirse en un éxito de culto. Con esa base, el estudio decidió apostar a lo grande con su secuela, Las crónicas de Riddick elevando su presupuesto hasta 120 millones de dólares. La idea era que esta se convirtiera en la próxima gran franquicia de ciencia ficción de Universal Studios, especialmente aprovechando la creciente popularidad de Vin Diesel tras el éxito de la primera película.
Sin embargo, el destino no fue tan amable con la saga. Aunque Las crónicas de Riddick logró recaudar 115,9 millones de dólares en todo el mundo, esa cifra estaba muy lejos de cubrir su presupuesto y los costos de marketing. La película, que aspiraba a liderar las taquillas, se vio opacada por el estreno de Harry Potter y el prisionero de Azkaban, que llegó a los cines una semana antes.
Un giro inesperado
Luego de este fracaso, parecía que la franquicia estaba condenada. Todo indicaba que lo último que veríamos sería el corto animado Furia Negra, que servía como puente entre las dos primeras películas. Sin embargo, aquí es donde Vin Diesel juega un papel clave en la resurrección de la saga.
En ese momento, Universal estaba atravesando problemas con otra de sus franquicias: Rápidos y Furiosos. La tercera película no tenía el éxito asegurado, y el estudio necesitaba que Vin Diesel apareciera, aunque fuera en un cameo. Diesel aprovechó esta situación y negoció un trato: aceptó hacer una aparición especial en el final de Reto Tokio a cambio de los derechos de la franquicia de Riddick.
Con los derechos en su poder, Diesel esperó el momento adecuado. No fue hasta 2013 que consiguió estrenar Riddick, la tercera película de la saga, con un presupuesto mucho más modesto de 38 millones de dólares. Esta entrega recaudó 98,3 millones a nivel mundial, lo que demostró que todavía había interés del público.
El futuro de 'Riddick'
Después de más de una década de rumores y especulaciones, la cuarta película de la saga, Riddick: Furya, finalmente comenzó su rodaje a finales de agosto de 2024 y se espera que llegue a los cines en 2025. Aunque su presupuesto será similar al de la tercera entrega, es un verdadero milagro que una franquicia que parecía muerta en 2004 haya logrado sobrevivir.
La gran pregunta ahora es si Riddick: Furya será la última película de la saga o si Diesel y el director David Twohy tienen más historias por contar. Lo que es seguro es que, a pesar de todos los obstáculos, Riddick sigue vivo y sigue dando batalla en la ciencia ficción.